Es la más frecuente. Son placas rojas cubiertas por escamas blancas, secas, que se desprenden fácilmente. Pueden tener distintos tamaños y formas.
Corresponde a pequeñas lesiones rojas, milimétricas con escamas blanquecinas. Son múltiples, de aparición brusca, generalmente en niños y adolescentes, posteriores a un proceso infeccioso de vías aéreas superiores y se ubican en el tronco y extremidades.
A diferencia de la vulgar son lesiones sin escamas, localizadas en los pliegues de la piel como axilas, ingles o debajo de las mamas. Pueden fisurarse.
Generalizada: es una forma clínica severa, infrecuente, con compromiso del estado general del paciente y se aconseja su internación. La psoriasis pustulosa puede ser localizada a nivel de las palmas de las manos o en las plantas de los pies.
Es un tipo infrecuente, muy severo y también requiere internación. Generalmente es secundario a tratamientos incorrectos o infecciones y se presenta con una coloración roja generalizada que compromete entre el 80% y la totalidad de la superficie corporal. Suelen presentar fiebre, escalofríos, y alteraciones hemodinámicas.
Existe un porcentaje importante de compromiso de las uñas con hoyuelos, destrucción de parte de la uña o con material debajo de las mismas. En la artropatía psoriásica el compromiso de las uñas es importante.
Afecta principalmente articulaciones periféricas y también puede afectar la columna vertebral.